Como parte de la Temporada “Raíces”, la Orquesta Filarmónica de Medellín presenta la Novena Sinfonía de Gustav Mahler, un viaje sonoro entre la vida y la eternidad, entre lo íntimo y lo desgarrador. Este concierto reunirá a más de 120 músicos en escena, al integrar la Filarmónica de Medellín y la Orquesta Sinfónica de Estudiantes del Departamento de Música de la Universidad de Antioquia en un encuentro que celebra el talento, la formación y la unión de generaciones a través de la música.
- Un viaje sonoro entre la vida y la eternidad: la Orquesta Filarmónica de Medellín interpreta la última sinfonía completa de Gustav Mahler, una obra que oscila entre lo íntimo y lo desgarrador.
- Más de 120 músicos en escena: la Filarmónica de Medellín se une a la Orquesta Sinfónica de Estudiantes del Departamento de Música de la Universidad de Antioquia en un concierto que celebra la unión de generaciones y el poder de la música compartida.
- Una batuta maestra: el director chileno Paolo Bortolameolli, especialista en Mahler y una de las figuras más relevantes de la dirección orquestal latinoamericana, conduce esta monumental obra.
“El desgarro, la resignación de la Novena de Mahler vienen de su amor a la vida y de no querer soltarla. Es una sinfonía conmovedora, profunda y realmente única”, expresa Paolo Bortolameolli, director invitado.
Fecha: sábado 13 de septiembre
Hora: Spoiler orquesta (5:00 p. m.) / Concierto (6:00 p. m.)
Lugar: Teatro Metropolitano
La boletería está disponible en latiquetera.com, con precios desde $9.900 para afiliados a Comfama y desde $44.000 para el público general.
Sinfonía n° 9 de Mahler se presenta gracias a la Alianza Filarmed Comfama; el apoyo del Ministerio de Cultura, la Asociación Nacional de Música Sinfónica, el Plan Nacional de Música para la Convivencia, el Teatro Metropolitano – Medellín Cultural y la Alcaldía de Medellín; también es posible a nuestro aliado Bancolombia, y con al patrocinio de Sura, Fundación para la Educación y la Cultura MUV, Mineros, Iluma, Fundación Fraternidad y Corbeta.
¿Por qué Mahler?
La Novena sinfonía de Gustav Mahler es la última que alcanzó a completar el compositor bohemio-austríaco: una obra cargada de melancolía y despedida, que refleja el apego a la vida y la aceptación de la muerte. Escrita en 1909, condensa una hondura espiritual única y se convirtió, tras su estreno en 1912 en Viena bajo la batuta de Bruno Walter, en un hito que marcó el rumbo de la música moderna.
Mahler la escribió en un momento de extrema fragilidad: había perdido a su hija Maria y padecía una cardiopatía que lo llevaría a la muerte apenas dos años más tarde.
En esas circunstancias, la Novena se revela como la confesión más íntima de un hombre que amaba intensamente la vida y que, precisamente por ello, se resistía a dejarla.
El director Paolo Bortolameolli lo resume así:
“Siempre he considerado a Mahler un narrador consistente. Sus sinfonías son capítulos de una misma historia que comienza en la primera nota de la Primera y culmina en el silencio de la Novena. En ella se siente la huella de un hombre que amó profundamente la vida y que, justamente por eso, se resiste a dejarla. Esa tensión entre el apego y la despedida la convierte en una de las obras más humanas y trascendentes jamás escritas”.
El impacto de esta sinfonía fue inmediato. El propio Alban Berg —compositor austríaco (1885–1935), discípulo de Arnold Schoenberg y figura central de la Segunda Escuela de Viena— escribió a su esposa en 1912: “El primer movimiento es los más grande que Mahler haya compuesto jamás: es el anhelo de vivir en paz y disfrutar de la naturaleza antes de que llegue la muerte”. Desde entonces, la Novena se considera no solo una obra maestra, sino también un testamento sonoro que sigue conmoviendo a cada generación.
El director
El chileno Paolo Bortolameolli es actualmente Director Musical de la Filarmónica de Santiago (Ópera Nacional de Chile) y de la Orquesta Sinfónica Nacional Juvenil (Chile). Reconocido como uno de los directores latinoamericanos con mayor proyección internacional, ha sido invitado a dirigir orquestas en Europa, Estados Unidos, Asia y Latinoamérica.
Su visión artística se centra en acercar la música clásica a nuevas audiencias a través de proyectos innovadores, como Clásica No Convencional y Ponle Pausa. En 2024 fue incluido por Forbes entre los “50 chilenos más creativos” y en 2025 asumirá como Director Titular de la Filarmónica de Santiago.
Para él, dirigir una orquesta “significa formar parte de un proceso humano cómplice en la búsqueda de momentos de belleza. La música es una necesidad esencial, un lenguaje universal y un espacio de pertenencia”.